Un poquito de poesía para las nuevas generaciones:
Abro el whatsapp.
Deslizo el dedo por la barra
de contactos hasta llegar a su nombre.
Deslizo el dedo por la barra
de contactos hasta llegar a su nombre.
Ha cambiado su foto de perfil.
Encogimiento de estómago.
Encogimiento de estómago.
Su frase de inicio, al menos, sigue intacta,
me digo respirando con alivio.
me digo respirando con alivio.
Entro.
Está en linea.
Otra vuelta más por las tripas.
Otra vuelta más por las tripas.
Pulso, al azar, una letra.
La borro.
Siento el cosquilleo
del que mira al precipicio.
La borro.
Siento el cosquilleo
del que mira al precipicio.
Compruebo que soy
el mismo cobarde de siempre.
el mismo cobarde de siempre.
Y entonces pienso
qué ocurriría con mi vida,
con el mundo,
si en ese preciso momento,
debajo de su nombre apareciera,
como un rayo de luz,
qué ocurriría con mi vida,
con el mundo,
si en ese preciso momento,
debajo de su nombre apareciera,
como un rayo de luz,
esa única palabra
que lo contiene todo:
que lo contiene todo:
escribiendo...
Luis Ramiro
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